Su gobierno le desea una pronta recuperación señor Jenkins

Ya les  hablé de Mr. Jenkins, el desertor retenido en Corea y de su reunión en Yakarta con su familia. Pues bien, ahora se encuentra ingresado en un hospital japonés, donde le están tratando de sus dolencias. El gobierno norteamericano se comprometió a no pedir su extradición mientras esté hospitalizado, así que se prevé que su estancia sea larga, siga enfermo o no, hasta que se consiga un indulto.
 
Mi enfermedad más grave es la atracción que parezco ejercer sobre los mosquitos japoneses y su afición a picarme. No sé lo que tendrán, pero cada vez que me pican la inflamación supera el tamaño de un huevo (de gallina). Eso sí, el que me picó anteayer cayó fulminado entre mis manos tras cometer el vil acto. ¿Debo renunciar a mis ideales y lanzar una guerra preventiva contra los dípteros? Necesito un balneario.

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