Hiperactivos

Los japoneses están enfermos. Cuando les digo que en España los estudiantes tienen casi tres meses de vacaciones primero abren los ojos tanto que parecen occidentales y luego se pregúntan qué hacen con todo ese tiempo sin aburrirse.
Ya no les cuento cuando se enteran de que un trabajador estándar tiene un mes de vacaciones, o los dos meses y medio de los maestros y demás docentes.
Primero piensan que tenemos (tenéis) suerte, que comparando con ellos así es, pero lo que sorprende es que seguro que se volverían locos con "tanta" vacación.
Otra cosa llamativa es que, a falta de festividades religiosas, aquí los festivos nacionales vienen determinados, en su mayoría, por las fechas en las que nacieron los diferentes emperadores. Pero como emperador, igual que las madres, sólo hay uno (el de ahora, sea el que sea), cuando éste muere, el día llamado "Fiesta del cumpleaños del emperador" cambia de fecha (o no, si por casualidad coincide) al día en el que nació su sucesor, y se busca un nuevo nombre y motivo que celebrar para la festividad anterior. Así, aquí existe el día del mar, el de los ancianos, el de los niños, el día de "dar las gracias a los trabajadores" (no confundir con el uno de mayo), día de la vegetación... etc.
¿Se imaginan al gobierno español proponéndoles a los empresarios el establecimiento del día del mar como festividad nacional? Uh, pues eso...

Comentarios

Entradas populares de este blog

En el plató

Niebla espesa (más iconoclastia)

Feliz Año del Jabalí 2019