Carta abierta a D. Joaquín Aranda
Algo tengo que reconocerle, señor Aranda, y es que, por más que quiera yo, que ya hace más de dos meses que me trasladé a Japón, no deja usted de sorprenderme. Haré, para tranqulidad de mi espíritu, como que no he visto el adjetivo que usted emplea, permítame recordárselo: bazofia, para calificar al mundo de los tebeos, del que formo parte activa. Por el contrario, es evidente que el mundo del cine o la literatura, con títulos como Los albóndigas, Dr. Doolittle, o todas esas noveluchas baratas, nunca serán merecedores de semejante epíteto.
Decía Arnold Schoenberg que cuando le mostraban una música que no le gustaba (entiéndase sin fallos técnicos), la escuchaba una y otra vez hasta que conseguía que le gustase. Sin embargo usted se considera capaz de situarse, no ya por encima de Schoenberg, sino que encuentra fuerzas en sí mismo para corregir “a Fellini y a algún otro genio”. Disculpe, señor Aranda, pero ¿dónde están sus obras maestras? ¿Dónde está su “La dolce vita”, su “La Scala”, que le permita ponerse al nivel de corregir a los genios? Enséñenoslas, por favor, como público estamos deseosos de ver su contribución para sacar al arte de la bazofia. Sin duda un hombre que se atreve a hacer este tipo de afirmaciones podrá respaldarlas con su talento. Si no me falla la memoria (y no me falla), el año pasado usted fue merecedor de un premio Adlo!, el equivalente a los Razzies del cine americano en el mundo del cómic español, pero creo que ése no es mérito suficiente y deberá demostrarlo de otra manera.
No acaban aquí las sorpresas, sino que usted pide tebeos que se puedan comparar a una novela (excluyendo al Quijote) más o menos buena. En primer lugar debería precisar qué entiende usted por una buena novela (¿incluyen las nivolas de Don Miguel de Unamuno o sólo a las novelas?), partamos de eso. Después, supongo que usted, como crítico de cine, usará la misma técnica para valorar sus películas, es decir pensar cómo sería esa película en novela. ¿No le parece un sistema un poco pobre para un crítico profesional? ¿No considera usted al cine como un arte que pueda ser independiente? Más allá, ¿cómo consigue que le funcione esa técnica al visitar una exposición de escultura? El comparar otras disciplinas artísticas con la literatura, además de ofensivo, no parece la mejor opción.
Con respecto a su promesa de pública disculpa, me permito recordarle que Maus, de Art Spiegelman, fue un cómic merecedor de ganar en 1992 un premio Pulitzer, un premio literario, señor Aranda, pero igual no le parece un galardón lo suficientemente prestigioso, al igual que la opinión de Fellini y algún otro genio, e igual pide compararlo con un Nobel (sea de Literatura, Medicina o de la Paz).
La lista es amplia, y permítame recomendarle la lectura de Persépolis, Paracuellos, V de Vendetta, Miracleman, 300, Watchmen, Adolf, Monster y, si le gusta el cine francés, pruebe con el Nouvelle manga, que bebe de su espíritu y forma: La espinaca de Yukiko, El almanaque de mi padre, La guerra de Alan, Barrio Lejano o En la prisión... por citar lo primero que me viene a la cabeza.
Sin embargo, lo que a mí me produce más desprecio, y muy pocas veces risa, es ver a señores maduros empantanarse en escribir bazofia, intentándola hacer pasar por críticas serias, que, de ninguna manera, pueden compararse ni siquiera con una novela medianamente mala. ¿No cree usted que debería darles vergüenza?
Comentarios
Quizás explique eso la crudeza de los calificativos. O simplemente estás ante alguien incapaz de aprender, y por eso trabaja como crítico...
Me apunto los títulos de tus sugerencias, que aunque si hay algunos que si trajiste, tambien hay muchos que no leí...
Hasta otra
Jose
Nada, nada, mencionar a una persona que se pasa por el forro de sus partes pudendas las opiniones de Fellini el premio Pulitzer de Maus es como el titulo de tu weblog. Quizas el colega Jose tiene razón y Aranda no ha tenido un buen guia en este mundillo ni interes alguno por tenerlo.
Felicitaciones por tu iniciativa del weblog. Ya te comente que me parece cojonudo en la ML de los Invisibles pero no viene mal recordartelo de nuevo.
Un saludote muy fuerte, Bruno.
Micko